martes, 25 de junio de 2013

Impresionante.

“Tienes que hacerlo ver creíble, hacerle creer al público que lo que ocurre es de verdad, que realmente todo está sucediendo.” Recordó las palabras que le había dicho su profesor de actuación, mientras faltaban solo unos minutos de la escena final… toda la obra había salido maravillosamente bien. Empezó a practicar sus expresiones, y los sentimientos que debía de sentir, que debía realizar en la última escena. Cuando salió, el otro actor la esperaba ya en escena, con una mirada triste, respiró profundo y dijo:

—Romeo, ¿serias capaz de morir por mi? —el actor asiente con la cabeza.

Se acerca hacia él, y lo abraza, sus manos se pasean lentamente por la ancha espalda, hasta que una se esconde en su cintura, saca una daga, y se la clava…
“Impresionante, impresionante” se escuchaba del publico, había logrado cumplir con las palabras de su profesor, sabia que estaría muy orgulloso de ella, había hecho lo que pensó que jamas haría para poder ser reconocida, matar a su hermano para que la escena se viera real, para que la escena fuera creíble, para que la escena fuera impresionante.

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