somos dos rulos que constantemente
no se tocan ni la punta
porque uno está en la nuca
y el otro en la frente
algo nos divide frecuentemente
no nos pone lentos ni nos apura
no nos une ni la casualidad pura
igual, sé que estás cerca, aparentemente
nos dibujo juntos cosidos con hilo rojo
a ver si logro manipular al destino
y hacer creer al universo, así sea un ratico
que sí estamos hechos el uno para el otro
a veces me creo matilda
capaz de mover objetos, y personas
pero de tanto ver y no hacer, me convierto en observadora
y cuando caigo en cuenta, en el laberinto estás abajo y yo arriba
entonces ya no soporto en mi mente el caos
se me enredaron los caminos de todos lados
no cumplir objetivos, ni obtener de ti un abrazo
ni de pies, ni cabello, ni manos
si no toca tocarnos ni hoy ni mañana, toca decirte chao
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