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cuando te conocí supe de inmediato
que escribiría sobre ti en cualquier momento,
porque dicen que hay que seguir a las coincidencias,
y en ti muchas había descubierto

esta no es la primera vez, ni será la última
porque cada vez que te vea me inspirarás
y aunque no te lo pida, y aunque no sea tuya
me mostrarás tus océanos, el pacífico, el índico
y los otros que no recuerdo ya
así como ellos, de gran cantidad
escribiré sobre ti

porque tus palabras caen sobre mí como ladrillos
y construyen castillos
pero descuidados y perdidos
que ni siquiera tú sabes que existen
que a veces se derrumban del abandono
y soy yo la que se olvida que siquiera llegaron a existir

contigo soy como gata curiosa
me tendrás siempre pendiente de cualquier movimiento que hagas
y me ayudarás inconscientemente a conseguir piezas
que ni faltaban en mi rompecabezas
pero que me hizo entender mejor la imagen

a veces siento que te molesto como una mosca
y que así de poquito te importo
que inevitablemente me encuentro cerca de ti
rodeándote, y queriéndome posar en tu comida
para que por un ratico aunque sea te fijes en mí

y yo sé que eres cambiante
no como las estaciones del año
sino como un camaleón

y que eres distraído,
quizás con objetivos no muy claros
que eres libre, temporal, momentáneo
quizás como un gitano

que si te fijaras en mis manos
y en lo que hago con ellas para ti
te quedarías un día en mi corazón
y luego huirías de aquí

pero entonces me tienes y no me tienes
y de cualquier manera no te das cuenta
de cualquier manera no te tengo
ni a ti, ni tus palabras, ni tu cabeza